Seleccionamos la técnica de auriculoplastía ideal para cada caso en particular. Probablemente la más común sea la aplicada para orejas prominentes o en asa; en la cual, mediante un abordaje por detrás de la oreja, eliminamos un segmento de piel y cartílago auricular. Luego rediseñamos la oreja y la fijamos al cráneo. La cicatriz queda prácticamente oculta.
Si la malformación auricular es importante, es conveniente conversar con los padres del paciente, para que éste sea operado a temprana edad, 5 o 6 años, para evitar el stress emocional del niño al ingresar a la escuela.
Utilizamos anestesia general o anestesia local, sumada a una sedación proporcionada por el médico anestesiólogo. La cirugía demora aproximadamente entre 2 y 3 horas y luego de un corto período de recuperación, el paciente puede retornar a su domicilio.
En el postoperatorio y durante los primeros días posteriores, colocamos un vendaje protector.
Pueden existir complicaciones como en cualquier otro procedimiento quirúrgico, como la aparición de Hematomas, seromas, infección, cicatrices exageradas, etc., Son infrecuentes pero se pueden presentar. Se deben seguir indicaciones, cuidado y los consejos médicos para evitarlas.
El resultado de la operación es permanente. Rara vez es necesario un retoque.